Es una de las dietas más seguidas por los famosos como Catherine Zeta-Jones, Geri Halliwell y Robbie Williams. Creada en 1970, fue actualizada en 1992, ya que no incluía ciertos nutrientes. Una de sus particularidades es que permite comer alimentos altos en proteínas y grasas como huevos, carne, jamón, tocino, salchichas, mariscos, quesos y aderezos. A su vez, es una dieta baja en carbohidratos.
Algunas personas han sufrido de efectos secundarios como fatiga y náuseas. Tambíen, puede provocar que se eleven los niveles de colesterol. No es apta para diabéticos, enfermos cardíacos o renales, ni para mujeres embarazadas.