Muchas veces hemos escuchado decir que no debemos tomar líquidos durante las comidas y que si se desea hacer, esto debe darse luego de terminar de ingerir los alimentos, siendo preferentemente agua o infusiones lo que debemos beber.
Pero hoy nos enteramos que en la Universidad de Buffalo en los Estados Unidos, se ha realizado un estudio cuyos resultados indican los efectos muy positivos que significa tomar jugo de naranjas con las comidas.
Ocurre que cada vez que ingerimos alimentos con una gran carga de grasa y carbohidratos, se genera un proceso inflamatorio y oxidatorio en nuestros organismos debido a esta insana alimentación, sin embargo, parece ser –según el estudio- que los flavonoides que posee el zumo de naranja se encargan de eliminar estos estados perjudiciales para el organismo.
También se ha podido observar que tras consumir el jugo de naranja los vasos sanguíneos han presentado menor probabilidad de verse afectados por daños generados por estas ingestas inadecuadas; y es que los radicales libres son los que por lo general terminan llevando a que el revestimiento de estos vasos se inflamen y aumente el riesgo de ataques al corazón o de males cerebrovasculares.
Son los flavonoides naringenina y hesperidina, al parecer, los causantes de estos beneficiosos efectos en el organismo luego de una nefasta comida con grasas y carbohidratos. Y es que sus propiedades provienen de su enorme calidad como antioxidantes.
Los problemas de inflamación que se generan luego de una comida inadecuada son recurrentes, y producen malestares y posteriores enfermedades, además que también se sabe que un alto nivel de glucosa y de triglicéridos son los responsables de males cadiovasculares.
Aquellos que durante la investigación bebieron agua o una bebida gaseosa quedaron expuestos a estos males, razón por la que parece ser que el jugo de naranja es la respuesta adecuadaluego de una comida, sobre todo en este tipo de combinaciones.
